Últimamente
estoy muy ausente, tanto en el blog, como en la vida.
Tengo
unas cuantas conversaciones sin siquiera abrir, de unas cuantas personas.
No, no
me ha sucedido nada malo. Al contrario.
En los últimos
meses, mi vida ha dado un cambio muy positivo.
Este
verano ha sido un verano de renacer, de recuperar la fe, de finales, de nuevos
comienzos…
Por
ello, decidí tomarme un “descanso” de muchas cosas, para así poder disfrutar
del momento, disfrutar de la vida, de cada día.
Desde
hace no mucho, siento que vuelvo a brillar, con más fuerza que nunca.
Me
siento bien, feliz, esperanzado.
Todo está
cambiando en mi vida.
Tengo
nuevos proyectos, nuevas ilusiones, nuevos todo.
Así
pues, dejaré por aquí un poema que escribí hace no mucho, espero que os guste.
Y sí,
volveremos a leernos :)
«Miro al
horizonte
y comienzo a sentir,
que en este mundo imponente,
me encanta vivir.
Este
mundo inmenso,
en el que existo solo porque pienso,
lleno de colores y armonía,
estar vivo es una verdadera alegría.
Aunque
en ocasiones llegue la noche,
no te desanimes,
disfruta del anochecer,
y sonríe, porque vives.
Y cuando
llegues a la recta final
y sólo te quede lo que viviste,
no tengas miedo,
y sonríe por lo que fuiste»
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